El Vacie, seguridad de barrio y chabolas

En verdad, se trata de “un encarcelamiento de diferenciación o de segregación, orientado a mantener apartado a un grupo y facilitar su sustracción del cuerpo societal” – Loïc Wacquant – Las cárceles de la miseria

 

Quien piensa que en “Europa” no existe favela se engaña. Los extranjeros, principalmente europeos que se van a Brasil con ganas de conocer a una auténtica favela como si fuese un gran parque de atracciones, no se dan cuenta que justito a su lado cuentan con una formación muy similar a la que tenemos allí.

Una turista sevillana llegó a ser asesinada al visitar una de las favelas del Río de Janeiro a través de una agencia de turismo sin darse cuenta que podría dar el mismo paseo por el asentamiento chabolista más antiguo de España, ubicado en el norte de Sevilla  llamado El Vacie.

El Vacie enfrenta casi los mismos problemas de marginación, infraestructura y prejuicio que enfrenta una favela. Actualmente El Vacie en este mes se ven enfrentando con la política del odio y la organización de la Asociación de Vecinos de Barrio de Pino Montano @PMGritaBasta que se manifiesta, organiza patrulla comunitaria y pide más policía en su barrio que está al lado de algunas chabolas del Vacie. Además de atraer con sus manifestaciones conservadoras y discursos de odio acerca de los moradores de las chabolas, también atrae grupos de ultraderecha como es el caso del grupo Vanguardia Social Sevilla que se infiltra con un discurso racista y xenófobo visto que gran parte de la población de El Vacie es de origen Gitana y/o no Española.

Los partidos políticos se aprovechan de la situación haciendo promesas de más seguridad, la policía aprovecha para adentrarse en las chabolas y pegar o amenazar a la gente, jóvenes “antifascistas” aprovechan las manifestaciones para pegarse con los de ultraderecha, garantizando así el derrame del odio de ambos los lados a través de la violencia cada uno llevando sus estrellitas, los de ultraderecha por tener pegado no se cuantos “antifascistas” y estos, por su vez, orgullosos por acto tan heroico. Y El Vacie, se queda en el vacío, invisible y con su futuro incierto.

El Vacie es el asentamiento chabolista más antiguo de Europa, situado en la zona norte de Sevilla, junto al cementerio de San Fernando. Las primeras chabolas datan de 1932, y según censo de 2016 contaba con 529 habitantes (disminuyendo de los casi 1000 que habían en 2009).

 

Desde la época de Franco les fue prometido pisos, pero hasta hoy ahí siguen viviendo en sus viviendas pre fabricadas de chapa de metal  y como puedan. Hay ahí cerca de 4 generaciones de familia. Este es su hogar.

Viven ahí casi cerca de 300 niños que sueña en tener su bicicleta, sus juguetes, sus cosas…

 

José, de 9 años, quiere una bicicleta de dos ruedas – “una monti“- y un coche “de mando de gasolina”, pero no cree en los Reyes Magos. “Son la basura”, afirma. A veces reformula la relación entre el mito y el entorno: “Los Reyes no pueden entrar aquí por la basura, hay ratas y ratones en las calles, en las casas, en las neveras y por todas partes, yo no creo en los Reyes”.(El País, https://elpais.com/diario/2008/01/05/andalucia/1199488926_850215.html)

Lo sentimiento de inseguridad en los barrios viene creciendo cada día más.  Digo el sentimiento.  Me restringiré aquí a hablar del caso de Pino Montano. Mientras escribo esto, estoy delante del periódico El Diario de Sevilla (Miércoles 19 de septiembre de 2018), en la página 10 que dice “Vecinos de Pino Montano dan una paliza a un delincuente del Vacie”. Sólo por el título de la noticia ya se podría hablar mucho.  Pero el caso es que, pocos días después de una manifestación desastrosa, uno de los propios vecinos se ocupó de pegar a un adolescente “delincuente del Vacie” que en el mes pasado había robado y apuñalado un adolescente del barrio de Pino Montano. Y sigue: “El delincuente en cuestión pertenece a una familia del asentamiento chabolista, cuyos miembros son conocidos por el apodo de los Melli y muchos de ellos tienen antecedentes por robos violentos con navaja y atracos con pistola”. (El Diario de Sevilla, Miércoles 19 de septiembre de 2018)

Los vecinos policía de Pino Montano “comenzaran a increpar al delincuente y éste comenzó a insultarle. Comenzó entonces una discusión que fue subiendo de tono hasta que varios de los vecinos  golpearon al ladrón, al que propinaron una paliza. Algunas fuentes apuntan a que incluso fue pinchado con un objeto cortante”  (ídem) . Bueno, si esto no parece linchamiento en plaza pública, yo no sé lo que es. Y es clarísimo que en esos casos, la policía tiene lado, ¿cierto?

Los móviles de los vecinos policía también sirvieran de arma para llegar a agrupar cerca de 20 a 25 miembros de la comunidad en el conflicto.

El “adolescente delincuente chabolista” un mes atrás  había robado a un móvil de un menor de edad del barrio con un cuchillo, luego junto con tres más robaron la bicicleta de otro chico del barrio.

Uno de los 3, de 17 años, fue capturado por la policía y se encuentra internado en un centro. Aquí van algunas opiniones reales de los vecinos de Pino Montano acerca del Vacie:

Carlos  @carlosdelator24 : “en el Vacie existe la basura delincuente…y tb gente wena…que necesitan una reinserción bajas unas pautas controladas…ellos si quieren mejorar y aceptan irse y se acoplan a la vida como todos nosotros…son iguales que nosotros…el forraje es el que se queda por otros motv”

Demonia @Y_aqui_sigo: “a ver si podéis dar cobertura de los problemas de seguridad en Pino Montano, Sevilla, con otro poblado marginal,  aquí es el vacie”

INCORRECTO-75 @cazafran2007 “Y una mierda…Todo es basura en el vacie…Nadie normal aguanta allí un día de su vida”

 

La propuesta de policía comunitaria que tanto seduce más y más los barrios que están ilusionados con los sentimientos de inseguridad, empezó a ganar visibilidad después de la política de Tolerancia Cero instaurada en los EEUU. En el libro “Las cárceles de la miseria”, Loïc Wacquant mostró cómo el gobierno de izquierda de Francia incorporó la propuesta estadounidense.  Hay que se acordar que la política de Tolerancia Cero fue adoptada no sólo en Francia pero por muchos países y por gobiernos de derecha y de izquierdas.

Para los desavisados, Tolerancia Cero es una política de seguridad ciudadana, puesta en práctica en la ciudad de Nueva York.  Sus principios están basados en un artículo publicado en 1982 y que explicita básicamente el siguiente:

“Consideren un edificio con unas pocas ventanas rotas. Si las ventanas no se reparan, los vándalos tenderán a romper unas cuantas ventanas más. Finalmente, quizás hasta irrumpan en el edificio, y si está abandonado, es posible que sea ocupado por ellos o que enciendan fuegos dentro.” James Wilson y Georges Kelling, Broken Windows

“O consideren una acera. Se acumula algo de basura. Pronto, más basura se va acumulando. Finalmente, la gente comienza a dejar bolsas de basura de restaurantes de comida para llevar.” James Wilson y Georges Kelling, Broken Windows

Lo que significa que, si no se actúa inmediatamente en el crimen cometido la situación de violencia y inseguridad tiende a aumentar en el barrio. Por eso, lo más justo es alejar cada vez más los individuos considerados  peligrosos de los barrios de bien, tales como personas sin domicilio fijo, prostitutas, toxicómanos, etc. Es una propuesta de seguridad política fascista que perjudica minorías políticas y éticas en general. Y que hace de los ciudadanos de bien,vecinos del barrio, ciudadanos policías que actúan patrullando y actuando con la violencia necesaria cuando necesaria, como vimos en el caso de Pino Montano.

Definitivamente, combatir la pobreza, ofrecer un mayor número de asistencias estatales y/o en alianza con la sociedad civil , pasó a ser entendido, también, como una política de seguridad. Las policías pasaran a frecuentar universidades, convidar filósofos y especialistas para sus dominios, convocar la participación  de la sociedad civil y participar de cursos sobre derechos humanos, o sea, aprender cuándo y cómo pegar menos en defensa del derecho primordial de la Declaración de los Derechos Humanos: la propiedad privada.

La violencia y sus mitos resultan de esta homogeneización entre, por un lado, la propiedad, el Estado, y los hombres de bien, y por otro lado, los comunes ciudadanos y los agentes  peligrosos habitando los mundos del crimen y de la subversión.

 

Para quién pueda interesarse, Callejeros, El Vacie, 1a parte:

Tole

Asesinatos de Estado, Racismo Institucionalizado, Estado de Excepción, Aquí y Allí

Mama África, mi mama, es madre soltera, y tiene que hacer biberón, todos los días además de trabajar como empaquetadora en las Casas Bahia. Es del Senegal, ser negro, Senegal…Debe ser legal, ser negro, Senegal…” (Chico César)

 

España, 15 de marzo de 2018

MADRID – En el barrio de Lavapiés en Madrid, Mame Mbaye muere por un infarto al huir de la policía por el hecho de ser vendedor ambulante, así como muchos senegaleses y no senegaleses en Madrid, España y en el mundo.

Acerca del barrio, en 1861, Mesonero Romanos nos decía que:

“Entre los que vinieron guiados de próspera estrella y cambiaron luego sus humildes trajes y groseros modales por los brillantes uniformes y el estudiado idioma de la corte, vinieron también aunque con más modestas pretensiones, los alegres habitadores de Triana, Macarena y el Compás de Sevilla, los de las Huertas de Murcia y de Valencia, de le Mantería de Valladolid, de los Percheles y de las islas Riaran de Málaga, del Azoguejo de Segovia, de la Olivera de Valencia, de las Tendillas de Granada, del Potro de Córdoba, y las Ventillas de Toledo, y demás sitios célebres del mapa picaresco de España, trazado por la pluma inmortal autor de QUIJOTE: todos los cuales, mezclándose, naturalmente con las clases más humildes de nuestra población matritense, adoctrinándola con su ingenio y travesura, despertando su natural sagacidad, su desenfado y arrogancia, fueron parte a formar en los Manolos madrileños un carácter marcado, un tipo original y especialísimo, aunque compuesto de la gracia y de la jactancia andaluzas, de la viveza valenciana y de la seriedad y entonamiento castellanos.”

Ya en la década de 1970, el barrio fue ocupado por un flujo de jóvenes, por la abundancia de viviendas de baja renta, y viviendas abandonadas. Haciendo de Lavapiés la morada y la organización de distintos colectivos libertarios, anarquistas y okupas. En el siglo XXI, es el barrio con la mayor cantidad de asociaciones y movimientos sociales de Madrid. Además, y también por eso,  es uno de los barrios de España donde más habitan inmigrantes. Puede que la mitad de su población sea de inmigrantes refugiados, ilegales, etc.

Mame Mbaye vivía allí, en la Calle Oso. Fue justo allí, huyendo de la policía que su corazón paró. Uno de sus amigos dice: “Vender en la calle es muy duro, no tenemos papeles ni ningún tipo de ayudas. No queremos robar.¿Qué otra cosa podemos hacer? Tenemos que pagar el alquiler y las facturas”. Ese mismo amigo dice que la persecución de la policía en los últimos tiempos tiene sido cada vez más constante y que cada vez que consiguen detenerlos les quitan todo el dinero y sus pertenencias.

Mame hacía parte del Sindicato de Manteros y Lateros de Madrid (Twitter: @manteroslateros) y hacía años venia intentando legalizar su situación en España para poder trabajar legalmente. Pero el infarto por la persecución policial interrumpió sus planes y sacó su vida de manera brutal.

 

¡Su corazón gritó, hartándose de tal situación!

La respuesta a esa atrocidad, a esa muerte indirecta por el Estado (que en verdad solo ahorró una bala) fue esta:

Un manifestante increpa a unos agentes

Un manifestante lanza un contenedor de basura a las llamadas durante la protesta

Un policía mira el interior de una sucursal del banco BBVA a través de los cristales rotos en Lavapiés

Murcia – En la mañana de jueves, 15 de marzo, vuelven los agentes de la Policía Nacional, armados con subfusiles de asalto a las obras del AVE, conocida como la “abuela del soterramiento”. Muchos vecinos lamentaban las imágenes que se veían, donde muchos de los niños tienen la costumbre de jugar y pasar por la región.

Uno de los vecinos comenta: “La policía con subfusiles de asalto en el paso a nivel, a los ojos de cientos de niños que cruzan hacia sus colegios. Imagen de otras épocas y regímenes”.

A pesar de las peleas y las hablas de aquí y de allí de partidos y gobiernos, lo que esta en cuestión es el ¿Por qué justo en este punto de la línea de AVE no se puede hacer el soterramiento, pero sí construir un muro? Un muro que corta totalmente la comunicación y la movilización de la urbanización, aislando cada vez más una población a que poco interesa a gobiernos capitalistas y neoliberales. Muros aquí, muros allí. Muros privados en Murcia, muros estatales en fronteras americanas.

La población de Murcia se manifiesta desde septiembre de 2017 por la próxima llegada del AVE en superficie. Desde entonces varios detenidos, heridos y presos. Mismo así, crece la resistencia de los vecinos frente a la Administración y a los partidos.

Pero, si parece que no sirve de nada la manifestación y revuelta de los vecinos, Murcia se quedará dividida en dos, por un muro de 5 metros. Acerca del cuanto eso dificultará la comunicación y la movilidad y aislará la población, el Sr. Ministro del Fomento, Íñigo De la Serna “comprende” el problema pero entiende que el muro es una cuestión de “garantizar la seguridad” y que “bago ningún concepto [quiere] poner en riesgo la seguridad”

Gobiernos aliados al sector privado, intentan acalmar las resistencias. Y el sector privado presiona el gobierno para que calme su población de una manera bien clara. Aldesa, la empresa adjudicataria de la primera fase del soterramiento, amenaza al gobierno, para que haga con que “su gente” se calle, cuando amenaza abandonar las obras por violencia, ya que las manifestaciones ponen en riesgo sus funcionarios: “No son manifestaciones ni vandalismo, es violencia” dice el responsable de la Obra Civil de la compañía.

Con eso, no sorprende que más represión, violencia estatal, estado de excepción vengan por ahí, y que la población de Murcia tenga que se conformar con el muro de 5 metros.

RÍO DE JANEIRO“La carne más barata del mercado, es la carne negra” (Elza Soares)

Alrededor de las 21:30 de la noche de miércoles, 14 de marzo de 2018, fue asesinada con 4 balas en la cabeza, de forma sospechosa, la concejal Marielle Franco (PSOL). Mujer, negra, feminista, joven y carne de favela. Nacida y criada en la favela de la Maré, el mayor complejo de favelas y uno de los más violentos de Río de Janeiro, la concejala de izquierdas fue un símbolo de la lucha de las mujeres negras en Brasil contra el racismo, el machismo y la violencia policial.

DISTINTAS PERO NO DISPERSAS

Marielle hablaba abiertamente acerca de la agresividad y militarización de las favelas, donde los residentes además de estar bajo el control brutal del narcotráfico también están aterrorizados por la violencia policial.

En 2016, la policía mató mas de 4.200 personas en Brasil. Las víctimas son desproporcionalmente negras. El presidente Michel Temer puso el ejército a cargo de la seguridad de la ciudad en muchos casos. La derecha gana popularidad entre toda la población. Los residentes de las favelas se oponen brutalmente a esas movidas, por el temor que solo provoque derramamiento de sangre en las periferias y en su vecindad. “¿Cuántos otros tendrán que morir para que termine esa guerra?”, escribió Marielle en uno de sus últimos tweets, abordando la violencia policial. La concejal acababa de ser nombrada como relatora de una comisión que supervisa la militarización de la seguridad pública (que incluye la investigación de las UPPs de las cuales se habla en el archivo PDF que esta en el artículo interior).

Una de las funcionarias de la concejal fue abordada por un hombre de forma amenazadora en una parada de autobús cerca de 10 días atrás. Él cuestionó, en tono amenazador, si la funcionaria trabajaba con la concejala. Cuatro días antes de morir, Marielle había denunciado la truculencia de los policiales del 41° Batallón de la Policía Militar contra los moradores de la favela del Acari, en la Zona norte de la ciudad de Río de Janeiro.

En el jueves 15 de marzo, hubo manifestaciones “pacíficas” en todo el País por la muerte de Marielle, con decires como “Lucho es Lucha” y “Policía Asesina, no nos va a hacer callar”.

Una vez más, el Estado calla una voz joven y potente. La policía sigue en las favelas y seguimos siendo marginales, radicales, terroristas, aplastados más y más…pero seguro, deben de haber salidas…

Y en el luto, cantó Caetano Veloso parte de su canción “Estou Triste”  (Estoy Triste): “Estoy triste, tan triste y el lugar más frío de Río es mi cuarto” :https://twitter.com/caetanoveloso/status/974316649473101824

Y un amigo escribió certeras palabras:

“Una ejecución que hace cuestión de mostrar que es ejecución tiene uno objetivo claro: provocar el miedo y el terror en todxs que se oponen a la violencia asesina de las fuerzas de seguridad. Nunca fue tan clara esa frase: ¡terrorista es el Estado!” (Twitter: @acacio1871)